El Departamento de Justicia y el de Seguridad Interior anunciaron en un comunicado que, por las circunstancias relacionadas con la COVID-19, decidieron postergar temporalmente las audiencias del programa “Permanecer en México” (MPP por sus siglas en inglés) hasta el 1 de mayo.
Los críticos de ese programa denuncian que supone un desmantelamiento del derecho de asilo y lanzaron una batalla judicial contra su implementación que llegó hasta la Corte Suprema. El 11 de marzo, el alto tribunal concedió al gobierno una autorización temporal para mantenerlo.
El programa anunciado en diciembre de 2018 e implementado un mes después establece que todos los solicitantes de asilo que llegan a la frontera sur de Estados Unidos esperen la resolución de sus casos en territorio mexicano.
Según datos de la Casa Blanca, más de 60.000 migrantes, la gran mayoría centromericanos que huyen de la pobreza y la violencia en sus países, han sido devueltos a México en los 13 meses de implementación del programa.
En el comunicado, los departamentos citan las nuevas directivas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) por el nuevo coronavirus y afirmaron que van a seguir revisando las condiciones impuestas por la epidemia.
Las autoridades también señalaron que van a tomar más decisiones en la medida que sea necesario para asegurar que “todas las audiencias del programa puedan proceder de la forma más expedita posible”.
Las autoridades explicaron que cualquier persona que tenga una fecha de citación antes del 1 de mayo debe presentarse en el puerto de entrada el día que estaba programado para recibir una nueva fecha.
Migrantes piden repatriación
Mientras tanto la desesperación sigue empujando a los migrantes a reclamos extremos frente a la amenaza del coronavirus.
Al menos una persona muerta y 14 heridas dejó un motín en una estación migratoria del Instituto Nacional de Migración de México (INM), en el estado de Tabasco, informaron ayer autoridades.
El INM dijo en un comunicado que los migrantes, en su mayoría hondureños, exigían retornar a su país de origen ante el cierre de fronteras por la contingencia del coronavirus.
Durante la manifestación, los migrantes quemaron colchonetas, lo que ocasionó que 14 de ellos se intoxicaran, y otro falleciera por asfixia, dijo el instituto.
Inicialmente, fuentes policiales habían informado que había 20 heridos. El INM dijo que el fallecido era un ciudadano guatemalteco de 42 años.
Agregó que 27 personas escaparon de la instalación migratoria “cuando se abrieron las puertas para poner a salvo a la población afuera de las instalaciones”.